Published by Adriana Cantoral, May 31st, 2015
“Paradójicamente nuestros avances tecnológicos serán nuestras pérdidas culturales".
Beatriz Eugenia
Beatriz Eugenia es una artista plástico que se caracteriza por recurrir a técnicas clásicas, pero con temas y problemáticas contemporáneos. La pintora posee la perseverancia de plasmar capas principales, generalmente al temple,
Redacción y Curaduría: Berenice Rojas Cevada.
Beatríz Eugenia.
Nacida en México. D.F. 1962.
Cuenta con diversos estudios artísticos, desde la figura humana, hasta el abstracto, así como técnicas Antiguas al temple y escuela de la pintura clásica.
Ha expuesto en varios países, desde México, España, Colombia, Estados Unidos, Croasia etc.
Dentro de su variedad extraordinaria de series y obra, encontramos: "Planeta Desechable".Serie realizada con un impecable manejo icónico y de analogías, a través del surrealismo y el simbolismo.
La luz que entra por la ventana es la única protagonista coherente de toda la escena, análogamente a la luminosidad de la razón, pues ese destello ilumina tanto a los bajeles del exterior como al arlequín que hace acrobacias con el planeta. “Lo bailado nadie me lo quita” forma parte de la serie “Planeta desechable” donde el tema principal es la destrucción paulatina de la Tierra.
Uno de los compromisos más trascendentes para el artista es la transmisión de sus preocupaciones más íntimas. Beatriz Eugenia nos lleva a una profunda reflexión sobre lo que ha sido, es y lamentablemente parece que seguirá siendo el papel del ser humano ante su medio ambiente en una concepción que la pintora refleja magistralmente por medio de la ironía.
Beatriz Eugenia Hernández Pizarro
Distrito Federal 1962
Nos escondemos tras máscaras no para interpretar lo que deseamos representar sino, por lo que deseamos excluir… nosotros mismos.
Beatriz Eugenia -sin dejar fuera el surrealismo- en “Planeta desechable” nos muestra ese inconsciente que se transforma en lo consciente. A través de mostrarnos el desconocimiento de nuestra identidad humana y natural por medio de las formas y el color nos enfrenta con nosotros mismos, a esos otros que también somos y que negamos porque nos aterra y hiere.